De nuevo
Nunca se nos olvidó caminar
por la senda que un día dibujamos.
Sólo que nos perdimos, un instante, el tiempo
en el que no supimos encontrar nuestras miradas.
Y hoy te pido que me des tu mano,
que me vuelvas a mirar con tus ojos tristes.
Que me quieras como yo hago aunque no te lo diga,
aunque el camino sea largo y aún estemos buscándolo.