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;-)

no busques libélulas pq. no las hay...

cómo decir "encantada de habernos conocido y hasta otra"
gracias por haber estado aquí; es hora de cambiar de lugar... "la vida es cambio, y el cambio es vida"... me voy con la música a otra parte... cambio de título y de bitácora... "experimentar es aprender"... no me escondo, ni tampoco desaparezco del todo... simplemente es hora de hacer las maletas y volar... "quien cree que ha llegado deja de progresar". No me preguntes la dirección, esta vez me tendrás que encontrar :)

"La calidad de un pintor depende de la cantidad de pasado que lleve consigo" Pablo Picaso

Desde tierras mexicanas me llegan estas palabras que comparto con quien quiera escucharlas...
Principio del Vacío
Usted tiene el hábito de juntar objetos inútiles en este momento, creyendo que un día (no sabe cuando) podrá precisar de ellos?
Usted tiene el hábito de juntar dinero sólo para no gastarlo, pues piensa que en el futuro podrá hacer falta?
Usted tiene el hábito de guardar ropa, zapatos, muebles, utensilios domésticos y otras cosas del hogar que ya no usa hace bastante tiempo?
Y dentro suyo?... Usted tiene el hábito de guardar broncas, resentimientos, tristezas, miedos, etc?
No haga eso. Es anti-prosperidad. Es preciso crear un espacio, un vacío para que las cosas nuevas lleguen a su vida. Es preciso eliminar lo que es inútil en usted y en su vida para que la prosperidad venga.
Es la fuerza de ese vacío que absorberá y atraerá todo lo que usted desea. Mientras usted está material o emocionalmente cargando cosas viejas e inútiles, no habrá espacio abierto para nuevas oportunidades.
Los bienes precisan circular. Limpie los cajones, los armarios, el cuarto del fondo, el garaje. Dé lo que usted no usa más.
La actitud de guardar un montón de cosas inútiles amarra su vida. No son los objetos guardados que estancan su vida, sino el significado de la actitud de guardar. Cuando se guarda, se considera la posibilidad de falta, de carencia.
Es creer que mañana podrá faltar, y usted no tendrá medios de proveer sus necesidades. Con esa postura, usted está enviando dos mensajes para su cerebro y para su vida:
1º usted no confía en el mañana.
2º usted cree que lo nuevo y lo mejor NO son para usted, ya que se alegra con guardar cosas viejas e inútiles.
Deshágase de lo que perdió el color y el brillo, deje entrar lo nuevo en su casa y dentro de si mismo.

(Juso, llevo un poco de retraso en los deberes de seducción... dos personas al día es mucho seducir para mí... qué tal si lo dejamos en tres a la semana? ;)

"El silencio es el ruido más fuerte, quizás el más fuerte de todos los ruidos" (Miles Davis)

desasosiego...

veo veo... qué ves...

Veo dos personas delante de la iglesia de San Juan. Cuando camino hacia el trabajo los veo dormir en el jardincillo, compartiendo manta con alguna que otra flor, alguna que otra caca animal, algún que otro ser vivo.

Al mediodía camino en sentido contrario, al pasar por San Juan me cruzo con ellos en lo que ya considero su "casa" al aire libre. La habitación, de 2x3 m, está perfectamente recogida: la manta doblada y la ropa de otro momento guardada en en dos o tres bolsas. Ellos están preparando la comida... algunas veces toca bocadillo de atún, otras de salchichón... algunas veces sólo saborean, de mano en mano, el caldo rojo que reconstituye cuerpo y mente (y que también te da alas).

A las cuatro de la tarde duermen la siesta, a no ser que algún vecino o visita inesperada se presente a la hora de comer y se prolongue la sobremesa... en alguna ocasión me ha parecido ver, a la sombra de la palmera, al mismo grupo en animada conversación y compartiendo zarzaparrilla.

De nuevo los observo al pasar por delante de la iglesia, a la hora del paseo y las confesiones. La plaza está llena de caminantes y a pesar del ruido, el ajetreo y las interrupciones, ellos observan desde su habitación esa otra vida de ficción, que transcurre paralela a la suya.

Veo veo... qué ves...

El balcón que hay en el local donde trabajo, da a una unidad de día de un centro de salud mental. Desde primera hora de la mañana hay mucho ambiente en la calle... además de ser un lugar de paso en el que van y vienen personas, el centro le da un toque distinto: las conversaciones, los deseos (el tabaco es un codiciado tesoro que se comparte de unos a otros), las canciones (hay una mujer que tiene buena voz). Mi compañero, que lleva más años en la imprenta, los conoce por la forma de hablar y las historias que cuentan... hay para todos los gustos.

Veo veo... qué ves... Veo un mundo al revés y aún así creo que siempre se puede hacer algo para enderezarlo...

(kika, chiquilla, que no se puede estar todo el día dándole al coco ;)

adaptación de un dibujete que estoy preparando para un calendario.... 

va por ti, kikateo!!... y recuerda... la alegrina es como la micebrina... una al día.


De medio puente... hoy viernes he trabajado... un ratito... ahora me piro otra vez al apartamento de la playa: un finde con las supernenas de la secu... qué risas y qué "enchenta"... qué habrá para comer? chocolate?...
Me han subido el salario... casi casi mileurista... casi...

Y yo que pensaba que esto se acaba por un "falta de"...

Suena Marful..."é concepçom monoteíst pensar que existe umha só soluçom"... la casa está vacía... sólo el ruido del tráfico en la rambla rompe el encanto de este momento: hoy es viernes, no trabajo por la tarde y tengo ganas de sentarme delante de la pantalla a jugar con formas, trazos y colores.

Hoy he compartido cada momento familiar... la comida: fideos a la cazuela (a la mierda la no mezcla de proteínas e hidratos... hoy es viernes y no voy a protestar); el momento impresora: la amiga republicana nos ha regalado la impresora que ni ella, borja y yo pudimos instalar; mi tia que me había dicho por la mañana que no vendría a tomar café, vino a tomar café y ver la telenovela... hasta yo compartí la telenovela "tiempos revueltos" o "difíciles" o algo así... por cierto la música es de Mónica Molina (después de pasarme un año con ese cd y alguno más como animales de compañía en el garito de los libros creo que podría reconocer su voz ;) dónde estaba?... ah, sí, en el momento familiar: las dos tías, la abuela y una servidora atendiendo a la telenovela... se acaba, conectan con chanel nº4, decido que por hoy ya llega.. comunico que me voy a leer... llega mi tio... vamos a ver qué nos cuenta me digo.. poca cosa y sin embargo por un momento pensé que era el más lúcido de la habitación cuando le pidió a mi tia las instrucciones del día... creo que ultimamente no me rio mucho de mi misma... mal rollito.. hay que reirse más... tomo nota de la situación.

Mi jefa está de vacaciones... es el primer momento "vacaciones" que pasamos juntas... he aprendido a valorar las cosas que están "al otro lado". Cuando me entrega una hoja de ruta, mi trabajo practicamente se limita al "ordenador" (ese gran incomprendido;) y estos días he tenido la oportunidad de recabar toda la información necesaria para llegar hasta el cajón de "trabajos pendientes". También he trabajado más la "comunicación" con mi compañero, y aunque la semana comenzó mal, hoy nos hemos dado el gustazo de terminar la jornada con una cerveza y aceitunas, felicitándonos mutuamente por el trabajo bien hecho, mientras esperábamos que la clienta que vende "comunicación visual" apareciera para llevarse su pedido. Esta clienta es todo un reto para mí... es capaz de decirme que nos entrega un pdf "listo para imprimir" y le faltan tipografías, reventado de color... mosquearse cuando le dices que su pedido se ha retrasado y decir que no entiende qué problema tenemos con los archivos que nos manda...

Hoy el día ha comenzado una sonrisa y termina con una canción... "El meu amic el mar és l'immens bressol de tots els blaus, i en el seu va-i-vé de so i color, aprenc el poc que tinc."

En un lugar de Galicia, de cuyo nombre todavía logro acordarme, vivía el ilustre hidalgo Don Loizaga, gran contador de cantatas sin puntos y aparte ;)
Me cuenta una santa madre, que no madre santa, que estos días de atrás se ha creado una pequeña trifulca, un rifirrafe, una enganchada, un alboroto, una contienda entre mujeres de una misma familia. El motivo?...una sonsera, como dice el cantar argentino. Un bote de pintura blanca mal cerrado, y el olor de la misma que se extienda por la casa... Y luego vienen las preguntas que dieron origen a los hechos: ¿Pero quien tuvo el descuido de dejar el bote de pintura abierto? Y las respuestas: - Yo no, corazón. - Pues tampoco he sido yo...y, ahora, como pinto mi estantería si la pintura se ha endurecido al contacto con el aire, eh? Y discrepan las damas, y se enrarece el ambiente,se indigesta la comida, se turba la digestión, se espesan los silencios y se nubla el pensamiento, se farfullan las palabras, se destemplan los nervios...Y llaman al timbre...y aquí nadie oye...Y cuando, al fin, se abre la puerta es Borja quien llega para decir: - Hay sordera en esta casa desde unos días a esta parte, y desconozco a qué es debido. Y, entonces, le pone una de sus mujeres,  al tanto de lo sucedido: -Pues que me he quedado sin pintura para poner a mi gusto mi preciosa estantería...Y otra voz, desde la cocina, añade:- No he sido yo...yo nada he tocado...-Dejemos las cosas así, responde aquella que junto a Borja queda. Y una, por situarnos en escena, camina junto al recién llegado pelando la pava, y le muestra la estantería de sus amores, aquella que por descuido ahora quedará como en origen, sin ser pintada, con su vieja cara de pino de área comercial ...Y la otra, la que discrepa, ésa nos queda también pelando, pero no la pava sino patatas que ha de freír con todo esmero para animar a la recua de comensales que se le vienen encima a las dos y media. Ésta, la que dejo en su tabernáculo sagrado, se afana, se entrega y se esmera para tener todo a punto.  -Ya casi están aquí los invitados y aún me queda el sofrito por hacer... piensa para sus adentros, que en estas horas de turbulencia (por experiencia lo sabe) no es bueno hacer comentarios en alto. Así, sin hacer apartes, escribiendo seguido, nos queda una de las protagonistas dando a la hebra con un joven apuesto, que acaba de llegar de no sabemos donde pero nos lo imaginamos, y a la otra en la cocina, absorta en sus pensamientos que, a esta  hora no son muchos ni dispares, pues toda su energía se entrega a los pucheros y sartenes, a pesar de ese cierto olor que hay por toda la casa a pintura fresca de bote mal cerrado...A nuestro buen y estimado Borja ya le han puesto al día, conoce al detalle lo acaecido y, prudencia obliga, guarda silencio. Porque él sabe los detalles de la efemérides, bien acabo de referir que se los han explicado sin dejar coma, ni incluso punto, pero desconoce la versión de aquella otra que, de cuando en vez, se deja sentir por el tenue ruido de un tenedor al ser depositado delicadamente sobre un plato. Pero Borja, nuestro Borja, el único de la terna que hoy está en la casa sin la acidez que regala esa pintura que se ha extendido por cada rincón de este hogar modélico, utiliza sus dotes de consumado estratega: levanta ambas cejas, da un paso hacia atrás, compone una mueca estudiada y sitúa una mano sobre el picaporte más íntimo de la casa. Hay un silencio breve; también lo hay en la cocina, pues en este instante tenemos a la cocinera presa de sus pensamientos: -¿Será mejor yogurt o melón de postre? Y en este pensamiento, callado como todos los pensamientos, la dejaremos para volver raudos a ese joven que mantiene la mano sobre un picaporte, una mano blanca, blanca como aquella pintura de la que ya casi nadie se acuerda, pero que entrega su perfume ya no sólo por la casa sino incluso por el inmueble entero.Y volvemos raudos porque la decisión que a tomado y que, en breve, hará saber a su contertulia ya no puede esperar más. La frase es concisa pero muy importante. Al menos para él. -  Voy a orinar, anuncia mientras gira esa manilla dorada, de diseño,delicada y  de leve curvatura. La dama que le acompaña, todo recato, lo deja solo mientras nuestro joven amigo simula entrar en la dependencia aliviadora. Libre de presencias, e incluso de miradas, se planta en un "visto y no visto" en la cocina. Allí, mentiría si no lo dijera, se le espera desde hace minutos que han resultado horas. No hay lugar, ni tan siquiera, para un -¿qué  tal?, un buenos días, una palmadita o un beso...que cualquier cosa sería hoy de agradecer. Que,según entra, ya le plantan unas afirmaciones en su propia cara:-Yo no he hecho nada. No he tocado el bote de pintura en ningún momento. Bien sabes que yo no me meto donde no me llaman.Para mí que, una de dos: O venía abierto (o defectuoso) de la ferretería, o lo dejó mal cerrado aquel mal encarado que vino con Ana en Septiembre. Yo no acuso a nadie, pero lo que sé es que no he tenido nada que ver en este asunto...Y cómo me están poniendo porque se ha esfumado la dichosa pintura...O, mejor, no se ha esfumado sino evaporado. El joven guarda silencio. Sopesa lo escuchado. Lo rumia sin prisas, pero también sin pausas, que él no es de los que deja que las cosas se pudran o no se afronten los problemas. Ahora, sí. Ahora, con lo oído, ya puede tomar decisiones. Y la primera que toma, y no es baladí, es acercarse de puntillas al cuarto de baño para soltar la cisterna, detalle que de no producirse podría generar dudas en aquella con la que departió primero...Y,amén de dudas, la certeza de que es un desconsiderado para con el siguiente usuario del cuarto de baño...- Que así no se dejan las cosas, pensará que piensa ella. Cumplida la añagaza ya está libre para dar a conocer su decisión. Se arma de valor y cita a ambas mozas en terreno intermedio, en terreno de nadie, por así decirlo. Él está crecido. Todo lo controla. Ya los tenemos en el pasillo, aunque ha costado más de lo esperado. La responsable en este día de lo que toca al estómago se ha hecho la remolona...Razón no le faltaba: -No puedo atender ahora a otras cosas, que están a punto de llegar los invitados. Pero Borja ha peleado bravamente y ya las tiene junto a él. Quiero recrear la escena: él, como organizador está en medio. Esto, pensado lo tiene, le dará mucho juego. Pede mirar, ora a un lado, ora al otro, y siempre tendrá a una de sus queridas chicas ante su vista; cualquier gesto que haga, a derecha o izquierda, tendrá a alguien para recibirlo e interpretarlo. Su posición es también la idónea para poner paz en el supuesto de que se agrave el conflicto e, incluso, para ser escuchado con mayor claridad y limpieza si hay quien ya tiene una cierta dureza de oído. Ellas están junto a él, una a cada lado. Los veo formando un triángulo; un triángulo humano y escaleno en un pasillo angosto.- Pelillos a la mar, amigas, que el mar bien a la mano os queda, dice.Y continúa: -No deseo ofender, sino buscar salidas al conflicto. Y como primera medida, como paño frío que alivie la calentura, aquí propongo abrir ventanas y  puertas, puertas y ventanas, para hacer huir como un bellaco de los de rabo entre piernas, a este hedor a pintura agria y vieja que os trastorna las mientes y os envenena el alma. Y sobre ese bote, sobre ese caldero que llegó con pintura blanca y que, por mano traviesa o descuido, se halla en ruina(que llegados a este punto no nos meteremos en ello), coloquemos una bolsa que lo aisle y ampare y yo mismo, sí, yo mismo seré quien de llevarlo al contenedor, en las horas que la ordenanza municipal aconseja. Y muerto el perro, se acabó la rabia. Y, ahora, aquí paz y, en breve, gloria. Y ¡hale! un besito de amigas y no se hable más. Las palabras de este joven bondadoso hacen recapacitar a nuestras dos mujeres, dos mujeres que se quieren y que comprenden que el vivir diario se hace con pasos generosos y con cesiones...que cariños y afectos ya se los dan y en cantidades que no son cortas. Se oyen besos primero, abrazos después, palabras en tono alegre y un "aquí no ha pasado nada" con voz varonil. Después, pasos, un timbrazo, una puerta que se abre, saludos, ruido de sillas, descorche de botellas, y un "todos a la mesa". ¡Oh!, qué lástima no poder estar sentado junto a todos ellos para disfrutar de la buena mesa, de la tertulia, de la compañía de la gente de bien...Se habla de todo lo imaginable, salvo de aquello de lo que llevamos muchas líneas hablando. Hay un amago, en el que nadie encontrará mala fe y sí buena pituitaria, en el que uno de los comensales insinúa si en la casa hay obras, albañiles, pintores o gente que se ampara en estos gremios para buscarse la vida...¡Nooooo!, se responde a tres voces. Y se añade para dar más fuerza a la negación:- ni recordamos el tiempo que no hay obras en esta casa. Pertinaz, el preguntón insiste:-Pue yo diría     que hay un cierto olor a barniz, a pintura, a aguarrás...Todos los presentes, y no son pocos, abren las aletas de sus narices y aspiran el aire con brío, intentando captar ese tufillo que tanto busca el de la nariz privilegiada. Pero nuestro mozo, el único del que conocemos su nombre de pila pues sus apellidos para estas líneas no vienen a cuento,sale al quite con soltura: -Deben estar de obra en el piso de al lado...pintando, creo. -Pues cerremos las ventanas...indica otro de los presentes...-¡Nooo!, responde la cocinera. A mí me parece que así estamos bien...¿No sentís el bochorno? El suspicaz se levanta, se dirige al balcón, se asoma, mira a un lado y a otro, después hacia arriba y hacia abajo, se encoge de hombros y regresa a su asiento: -Pues no sé.Yo no veo obra por ningún lado. A ver si es un escape de la Petroquímica...-¡Sí!, de esos no te puedes fiar, apuntilla Borja. Ya sabes como se las gastan y sin avisar. Y para fortuna de unos y descanso de los otros  no se habló más del asunto, y todas las conversaciones restantes apuntaron al tiempo atmosférico, a los colores de moda de este otoño, al mal funcionamiento de la cámara del portal y los desaprensivos que la ciegan, a las normas que cada uno dictaría para corregir el botellón, a la novela vespertina de la tele y al primo de Rajoy. Se levantó la mesa poco después de ausentarse los comensales...Sólo uno de ellos quedó en su silla. Es Borja ¿Apesadumbrado, quizás? ¿Triste por las conversaciones puestas sobre la mesa? ¿Algún pecadillo inconfesable que le ahoga? ¿Alguna multa al volante? ¿Tal vez un amor no correspondido? No. Conociéndole afirmaría que no es eso...Y no lo era, que Borja no es de amores no correspondidos, ni de multas al volante, ni de tristezas que le pesen. Que a Borja lo que detiene sobre la silla son pensamientos generosos...Sabe que ha arreglado el entuerto entre las mujeres, pero sólo a medias. La pintura por la que ellas porfiaban se echó a perder,o se secó,o era de ínfima calidad y no ha servido. Tanto le da...Había un disgusto entre ellas que, ahora, por suerte, está olvidado, pero puede resurgir de sus cenizas. Ha de actuar con diligencia y maña para poner remedio y que la situación anterior no vuelva a generar chispas. En el silencio en el que ha quedado ha entornado los ojos, esos ojos que son fiel reflejo de su nobleza...Y piensa, mientras simula una reconfortante siesta...Ya lo tiene. Se incorpora, se despide de las chicas y les recomienda que no clausuren las ventanas las ventanas en toda la tarde. -Si hay corriente tened cuidado, aconseja con el tono afable de siempre. Un gran tipo este Borja nuestro. Lo demás lo pongo en papel, a continuación, y sin extenderme demasiado : Borja ha pensado que, ante la falta de recursos de esas dos buenas mujeres, él debe ser generoso. Comprará pintura, la de mayor calidad que expongan en el bricolage, pagándola de sus ya limitados recursos económicos. Será el primer paso. Le queda el segundo que, aun siendo complicado en su factura, él será capaz de llevarlo a puerto: con cualquier motivo intentará quedarse en casa de las dos damas, en ausencia de las mismas. En esa soledad extraerá de su mochila el bote de pintura y la brocha comprada, y con esa mano blanca y ese corazón grande se entregará al profesional trabajo de pintar la estantería. Para que las damas no discutan y para que el deseo de ambas sea realidad. A veces los sueños se hacen realidad...sobre todo cuando un alma noble lo quiere.
Ya sale Borja de la habitación, incluso de la casa. Junto a la librería queda un cartel anónimo: Felicidades. Ya tienes tu librería pintada.

mi abuela dice que cada vez que leo un "librito de esos" me pongo insoportable... yo sigo adelante, y pienso, y admito que la abuela tiene razón... me pongo insoportable... por que creo que me podría haber consultado lo de pintar la estantería... de blanco, otra vez blanco... "es que es la única forma de que no se haga pequeña la habitación... al tener el techo oscuro... yo ya te dije que la pintaría de blanco cuando la compramos"... y sí, todo es verdad... reconozco que mi ansia era poseer la estantería...como si le pones margaritas, pensé... así que aparentemente no tengo derecho a cabrearme por nada.

Pero no es así... llegó a casa después de pasar fuera el fin de semana, entro en la habitación, veo la estantería blanca impoluta, los libros ordenados por... altura?... me cabreo pq. han decidido algo sobre un espacio que habito sin consultarlo; me cabreo pq. cuando decido expresar mi descontento, la respuesta es devolverme lo que había aportado en la compra de la estantería; me cabreo, pq. cedo al chantaje emocional, pq. cabrearse con la abuela no tiene sentido... ella se queda con el dinero y yo con un nuevo elemento en blanco.

Me cabreo pq. quiero vivir sola y espero... espero a otro momento, espero pq. los gurús locales de la economía dicen que dentro de un año o dos será buen momento para alquilar o comprar un espacio vital; espero pq. pagar 450 euros por 30m2, distribuídos en cocina, baño, 1habitación sin amueblar... sin calefacción pero muy soleado... pagar más de la mitad de mi salario, por ser la única persona que decida de qué color pintar la estantería de la habitación, me parece un atraco con alevosía y premeditación. Vivir sola sería estupendo, pero todo mi mundo quedaría relegado a casa, trabajo, casa, trabajo, y pasta con atún de nuevo para cenar. Me cabreo por ceder a mi propio chantaje.

Cuando leo un "libro de esos" también dicen que me molesta cualquier cosa y el comentario suele ser... "ays, chica, cómo te pones", si digo que cae de cajón que si no arrimas el plato a la sopera, lo más probable es que se derrame algo en el trayecto; cuando no digo nada y me limito a estar y compartir el instante comida feliz, se puede oír: "hoy, apagada o fuera de cobertura"... yo sigo adelante, y pienso, y admito que mi cara puede expresar justo lo que pienso. Admito que el único momento que "convivo" en familia, me carga, son necesarios muchos "1,2,3 relax" ... y sobre todo cuando leo un "libro de esos"...  me impresiona que me digan "yo estoy bien, tú no estás bien", sin siquiera pararse a analizar lo que hay alrededor; me cabrea descubrir que familia e intimidad son antónimos; me cabrea que la máxima diversión sea seguir los programas "de cocina" o los cotilleos ajenos y propios. Me cabrea ese único y diario momento familiar pq. me recuerda que cedo a mi propio chantaje con una versión edulcorada del "por el bien familiar" de mi abuela... "no vaya a ser que se ofendan"...

Así que... familia... mucha paciencia... que voy por la página 167 y ni siquiera es la mitad de "Los guiones que vivimos"... ya saben... "un libro de esos"...

Cada vez nos vemos menos... admito que mis visitas son más irregulares, y que cuando me acerco hasta tu casa, algunas veces me marcho sin dejarte ninguna nota. Hace unos días podría decirme aquello de que paso más horas delante de una pantalla, ahora creo que este guión, o contraguión, o lo que sea... está llegando a su fin. Mientras llega y no, te cuento las novedades.

El twingo, por fin, está en su nueva ubicación. Te lo comento pq. durante el viaje me acordé de ti... tuvo su toque romanticón de último viaje, los recuerdos de las aventuras vividas cambiaban con el paisaje... hubo un momento que estaba tan metida en la historia que pensaba escribirte que pasé por delante de un cuartel de la guardia civil a 70km/h...  Llegamos a Huesca sin ningún percance, y el reencuentro con la cuadrilla fue un regalo para el alma. (Marchar para poder siempre regresar). Un fin de semana muy completo... tiempo para compartir, para visitar una bodega de vino, para leer, disfrutar de la ausencia... y qué sería de un viaje sin su toque de emoción final, pensando que puedo perder el tren de regreso. En uno de los paseos que hacíamos desde la casa hasta la calle de los vinos, me encontré con estas flores... he pensado que en tu casa tendrían luz... 


 

Otra novedad es que ayer estuve cenando con el grupo del "aula 16"... otro momento de reencuentro, otro viaje por recuerdos, sensaciones y situaciones. Me sentó muy bien volver a disfrutar del dulce encanto de la juventud...creo que comienzan a entender que los años pasan para tod@s y no sólo para la gallega. Andrés lo llama estado pureta, yo prefiero lo de plenitud ;)

El guión familiar te lo cuento otro día que ahora tengo que comenzar a funcionar, he quedado dentro de una hora con la happy kuki band, nos vamos de fin de semana a la Secu. Ya te he hablado alguna vez de este lugar... algo así como los domingos de aldea. 

Nos vemos en unos días... ya sabes, todo depende de la "necesidad" que tenga de escribir. Un beso.

Ayer no podía dormir... demasiados pensamientos chocaban de un lado a otro... del izquierdo al derecho, del derecho al izquierdo... el tic tac del despertador contribuía al rebote constante... derecha tic, izquierda tac... ahora ya sé que el sushi no puede ser para cenar.. pensamientos, sushi, despertador... decidí encender la luz y leer un rato; tenía una novela de saramago pendiente y pensé que era tan buen momento como otro cualquiera para comenzar... abrí la primera página... ©de esta edición...abrí la segunda... a pilar mi casa... abrí la tercera... "Sabremos cada vez menos qué es un ser humano. Libro de las previsiones"... ya no pude seguir: Saramago había resumido en una frase cada uno de mis pensamientos rebotados. Cerré el libro, apagué la luz y quité la pila al despertador. Mañana es otro día. 

Estoy haciendo de la peque una montañera, apenas levanta seis palmos del suelo, y sus pies son dos pulgas enfundados en unas botas, pero ella disfruta con los pios y las flores, hace acopio de bellotas y piedrecitas para poner a cocinar en una olla diminuta:

Por las tardes salgo al monte voy caminando despacito, entre dos gigantes. Al cruzar la verja se pasa por entre zarzas y me suben en brazos para que no me pinche, luego enseguida llegamos a un camino de piedrecitas y arena. Es un camino ancho entre dos paredes de hierbas y tojos. Caminamos por el medio para no pincharnos con las ramas y yo llevo los brazos en alto para poder cogerme de las manos de mis gigantes mientras subimos la primera cuesta. Me canso un poco, pero sólo un poco. En lo alto, alto de un muro hay un perro que siempre nos ladra, ¡calla can!, le digo, pero el sigue ladrando, Gonzalo, el más grande de los dos gigantes, me dice que ladra porque el también quiere pasear con nosotros, pero a mi me da miedo y me cojo fuerte de su mano, como él es aún más grande que el perro seguro que le asusta y no se atreverá a saltar. Cuando el perro se calla, se escuchan los pajaritos, ellos también están de paseo, y cantan… a mi me gustaría cantar; sol, solito, caliéntame un poquito…pero no me acuerdo muy bien de la letra, además si canto no puedo mirar a todas partes. Hay nubes altas que corren entre los árboles y ayer vimos a un helicóptero, era rojo y blanco, y el avión que vimos después era blanco, iba muy deprisa y por el culo le salía una nube blanca también. La abuela giganta me ha dicho que se iba a Barcelona a ver a la tía Marta y a la abuela Mercedes, pero el avión era muy pequeño y no sé si Marta lo verá, pero si lo coge cuando llegue, se lo podría meter en un bolsillo y así luego vendrán con él hasta aquí. Yo en los bolsillos me guardo las bellotas y las piedrecitas. Me gusta mucho coger bellotas para la comidita de mis bebés, son como las croquetas que me pone papi. También hay bellotas con sombrero, pero el sombrero se cae y lo pierdo, además se me rompe en los bolsillos… me gustan más las bellotas sin sombrero. Y las castañas, cuando pasamos entre unos  árboles altos, había bolas con pinchos en el suelo, las castañas están dentro. Los pinchos se llaman erizos. Los erizos pinchan mucho, no se pueden coger con la mano. Gonzalo y la abuela los pisan  y dentro salen las castañas pero a mi no me salen cuando los piso porque tengo los pies pequeños. Cogí tres castañas y cuando llegue el invierno las pondremos en la chimenea y se las daré a los bebés, será comida de verdad. También he cogido flores, cada día cojo unas flores antes de llegar a casa, amarillas y azules, las azules son pequeñitas y las amarillas tienen unas ramas verdes muy duras, yo no puedo arrancarlas, me las cogen los gigantes. Y hay otras flores que tienen una bola de estrellitas, soplas y salen volando todas las estrellitas. En el camino hay muchas, pero sólo cogemos las que tienen la bola grande. Hoy cogí una  grandota para llevarme a casa pero en dos pasos salieron volando solas todas las estrellitas. Cuando se caen las estrellitas es una flor fea, así que la tiré y sólo me quedé con las amarillas y dos azules chiquitinas, cuando llegue las pondremos en un jarrón para mami.

He llenado mi lado izquierdo (o es el derecho?) de notas adhesivas para recordarme a mí misma que siempre hay dos caminos.
El sábado estuve de cena con la panda de 30 a 40 y me sorprendí cuando hablaban de la emigración como si fuera una peste. "En Galicia aún no os ha llegado". No dije nada, simplemente me callé. Me hubiera apetecido contar que las personas no emigramos por placer o por aventura. Quisiera haber abierto la boca para decir que por un instante podrían ponerse en su lugar, desarrollar algo de esta empatía que a mí me sobra, cerrar los ojos y colocarse en su piel: a nadie nos gusta estar lejos de nuestro hogar, de nuestra familia, de nuestros amigos. Pero me limité a escuchar... demasiadas batallas ya vividas durante la semana como para empezar una más. Cuando se comentó la posibilidad de ir un fin de semana a Sitges, alguien contestó: A Sitges? a qué? a ver mariconas? me pregunté si el médico que hablaba así sería capaz de tratar de la misma forma en la consulta de la seguridad social, a una pareja del mismo sexo, o a una pareja de árabes o a mí. Quizás, pensé, hacen como yo cuando entra en la imprenta el cliente borde de turno: una sonrisa y dígame usted qué desea esta vez.
El sábado pasó, y el domingo lo pasé tirada en el sofá, intercalando televisión aburrida, duermevela y libros de tipografía (Esto de poder adquirir por fin mis propios libros es una gozada para el alma). Así pasaron las horas y no pensé en ello más allá de lo necesario.
Hoy, en el trabajo, mi compañero estaba aburrido. Cuando sucede esto habla conmigo más de la cuenta, o más de lo que yo quisiera. Me contó que antes, cuando estaba su anterior compañera, y no tenían trabajo o estaban aburridos, se dedicaban a bajar fotos de mujeres con los pechos descubiertos y a valorar si eran de silicona o eran naturales. De nuevo callé y seguí a lo mío.
Al cerrar necesitaba un caramelo para dulcificar tanta estupidez y me fuí con la jefa a ver la nave nueva, en donde a partir de diciembre podré dar rienda suelta a todo lo imaginado y convertirlo en realidad.
©imagen:deviantart

qué más podía pedir? Suky se levantó temprano y sólo oí el ruido de la puerta al cerrarse. Cuando regresó, me encontró en el jardín disfrutando de una mañana de luz. "Gallega, te apetece desayunar con el periódico?" y en aquel momento supe que era feliz, qué más podría pedir? Café recién hecho, con leche y galletas, el periódico del día, en el mini jardín, un día de sol y la compañía de una buena amiga. Después de la vorágine familiar, necesitaba un día de relax, de cuentacuentos, de risas y complicidad, de cuidados y mimos.

Y quién es Suky? Nos conocimos en el curso de artes gráficas... cuando nos preguntaron en el primer día de clase qué hacíamos allí, ella contestó que estaba allí pq. estaba su amiga. Reconozco que al principio pensé: vaya par de dos!!... eso tb. me pasó el día que conocí a Siss... será que las personas a las que quiero siempre me resultan un tanto bordes en el primer encuentro? Con suky fue algo parecido, aunque luego comprendí que fue ese afán suyo de creerse antisocial, lo que nos llevó a no reconocernos en el primer instante. A partir de aquel día aprendimos a conocernos, a valorarnos en cada una de nuestras alegrías y a reirnos de cada uno de nuestros miedos.

Suky y yo somos compañeras de playa, de lectura, de charlas, de fiesta... somos capaces de crear una amistad sin necesidad de vernos todos los días, somos capaces de aceptarnos y querernos tal y como somos... somos capaces de crear complicidad a pesar de los más de diez años de diferencia entre nosotras... será que ella es muy madura para sus 23 y yo muy infantil para mis 35 ;)

Dicen por ahí que la plenitud comienza a los 40... no sé si será verdad, pero sí sé que ahora estoy donde quiero estar y soy lo que me apetece ser... será que en mi caso la plenitud ha decidido adelantarse unos años?

ya están aquí...

 

uf... que los comentarios me van a hacer sonrojar... lumieira... cuando levantes la veda de las fotografías, colgaré un post "ad hoc" a la imagen "papá salva"... tamos de traca!! (las del embalse son una pasada para los sentidos;)

Faxion y Car... tantas veces os dije que os quería??? bueno... ya saben ustedes que cuando la sidra me invade las neuronas, las verdades más sentidas salen a relucir... qué le vamos a hacer si todavía no he aprendido a guardar los sentimientos en el fondo del corazón ;) Las marionetas fueron una pasada... la maestra de ceremonia estaba un poco intranquila: falta de ensayo previo y dos aprendices que se lo tomaban con mucha calma... Siss, te envidio cuando pienso en la sorpresa que te llevarás al ver el video... eres una artista!!!... yo también creo que quedó de P.M... además vuestras risas ayudaron a relajar y pudimos disfrutar con vosotros aunque estuviéramos detrás del telón.

Voz... has sido tú... chica cocodrilo... la que me hizo pensar en ello... y en retomar el debate de las parejas, cariños y pareceres... ah, y tb. ayudaste a coser un poquito la herida de los celos ajenos e incomprensibles... (ya sabía yo que tenía que haberme llevado la capa y la espada al prao)... siempre es un placer pasar unas horas charlando contigo.

Por cierto... os he contado ya lo del apartamento en la playa fuera de temporada?... sí??... no me lo explico, qué difícil es venderlo!!! yo creo que cuando el tiempo libre disponible y las circunstancias personales propicias se combinen, podríamos meter en el consciente la idea de que la próxima quedada gastronómica se podría hacer en estas tierras... un simulacro de "(desear) es poder", imagino que si empezamos a desear ahora en un par de temporadas la organizamos.

Y cambiando de tema... Comença la Festa Major, ... la gente tiene ganas de fiesta, ayer estaba la plaza llena y éramos un grupo de lo más variopinto ... el concierto de Fangoria estuvo bien... volví a ser santa y beata, aunque me dejó sin "subir a la nube" ... del regreso de los beatles y de los rolling... para flipar y no cerrar la boca en un par de semanas... ahora mismo se me ocurren varias amigas/os que hubieran disfrutado "mogollón de mogollones" del momento... ( es que no entiendo como no se vende el apartamento por si sólo;-)... Visca, Visca, Visca Sta. Tecla!!!!!


marchar para siempre regresar... con la vida voy acumulando "paisajes y paisanajes" a los que me gusta volver. Hacía dos años que no estaba en Grandas y el regreso me ha sentado muy bien... alguna voz ha dicho que el regreso ha sido como un pequeño triunfo en mi vida... quizás yo lo he vivido de otra forma: el personaje que vociferó aquello de "lárgate del pueblo ya" no siente las misma emoción que yo, al volver a ver a las personas que llenaron, dos años de mi vida en el lugar donde habitan las nieblas. Personas y Lugares... el embalse, donde se escucha el silencio, como dice idima, o compartir una sidra en la Reigada con elena y susana, o volver a sentarme con lorena, margot, y victor en la terraza del Jaime, "botar unha baila" con linera... personas y lugares... bajar por la carretera hasta el embalse de salime... dejarse caer por el hotel... momento publicitario: el hotel está en venta, una ganga, el lugar es alucinante y hay ambientillo para un espacio más de ocio en el pueblo y alrededores... fin espacio publicitario.... comenzar a caminar hacia las "casas del salto"... recolectar y saborear moras silvestres...pillar una margarita y volver a ser unas niñas... y a mitad de camino hacia ninguna parte, poder navegar con la mirada en las aguas del embalse.

que voy, que voy... que me voy a Grandas... un fin de semana de encuentros... y a la vuelta... Sta. Tecla... por fin!!